lunes, julio 30, 2018

Regulación de aparcamiento en el atrio de Pontedeume

      El atrio es un espacio que pertenece a la Parroquia de Santiago de Pontedeume y, en colaboración con el Concello, se pone al servicio de quienes lo usan para aparcar y,  respetando el orden, evitar también abusos.
      Cómo habrán podido comprobar, se han hecho algunos cambios que, por nuestra parte, nos parecían indispensables:
Antecedentes:
      Desde mi nombramiento como nuevo párroco he asistido a innumerables percances entre los vehículos aparcados: roces, golpes, daños de diversa consideración... incluso a mi me ha tocado reparar el retrovisor de mi automóvil.
       El edificio del Templo sufre constantemente el deterioro de las salpicaduras de los coches aparcados junto a la pared, así como el deterioro del canal de evacuación del agua del tejado. Y qué decir de los vehículos con las ruedas dentro del mismo canal.
      Se han recibido quejas por no disponer de plazas para minusválidos, así como espacios para la maniobrabilidad de vehículos y para subida o bajada viajeros.
      La dirección por la que se circulaba impedía que los vehículos pudiesen arrimar junto a las jardineras laterales, por la incomodidad de los conductores de poder salir del vehículo entre los arbustos.
Lo que se ha hecho:
  • Proteger el edificio: colocando una linea amarilla perimetral donde no está permitido aparcar.
  • Ordenar la dirección del tráfico para facilitar que los conductores puedan arrimar mejor y apearse fácilmente del vehículo.
  • Reservar dos plazas de minusválidos. 
  • Y reservar dos espacios para la maniobra de vehículos y otro para la rectoral.
En resumen:
      Sabemos que hay opiniones de todo tipo, algunas de ellas interesadas y algunas otras  -las menos- mal intencionadas. Pero lo que nos ha movido a este cambio, y así espero lo entienda la mayoría, han sido tres razones: proteger el edificio, evitar percances y el servicio ordenado para todos, especialmente los desvalidos.
      Lo que no está bien es que algunos se crean con todos los derechos y sin obligaciones, no se respete la propiedad, a los demás usuarios, y el uso religioso y público que debe tener este espacio.